Medidas a largo plazo en la fijación de instrumentos de precio al carbono facilitarían ser carbono neutral
Ciudad de México, 4 de junio de 2021.- Los gobiernos y las empresas están adoptando objetivos climáticos a un ritmo acelerado. Los países con el objetivo de neutralizar sus emisiones a cero representan más del 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) globales, mientras que las empresas con este mismo compromiso representan en conjunto ventas por cerca de 14 mil millones de dólares.
En la mayoría de los países, las estrategias a largo plazo son escasas. Hasta la fecha, sólo 29 países han presentado estrategias de neutralidad de carbono a largo plazo.
De acuerdo con algunos especialistas, faltan señales de precios claras y sólidas para impulsar las inversiones en proyectos y tecnologías bajas en carbono a gran escala. La mayoría de los expertos coinciden en que poner un precio a las emisiones es esencial para lograr la descarbonización de la economía. Sin embargo, solo el 3.76% de las emisiones mundiales están cubiertas por un precio con un valor superior a 40 USD/tCO₂e. Este precio –de acuerdo a algunos economistas– es necesario para no rebasar 2ºC a la temperatura media global de la era pre-industrial.
Un análisis reciente de la eficacia de los precios del carbono ha revelado que, aunque éstos han tenido cierto impacto en la reducción de las emisiones, los precios bajos no han tenido impacto en la innovación e inversión tecnologías bajas en carbono.
La banca de inversión Goldman Sachs estima que se necesitarán precios a la emisión de dióxido de carbono superiores a 100 USD/tCO₂e para impulsar los avances tecnológicos necesarios. Asimismo, Woodmac predice que se necesitan precios de 160 USD/tCO₂e para alcanzar el objetivo climático de no rebasar más de 1.5ºC la temperatura preindustrial.
Un ejemplo de una visión a largo plazo, es la Unión Europea (UE) que está alineando su Sistema de Comercio Emisiones (SCE) con su objetivo de neutralidad de carbono para 2050. Esto ha generado un aumento en los precios de permisos de emisión con máximos históricos en los últimos meses.
Por su parte, el gobierno de Nueva Zelanda planea fijar su límite de emisiones para los próximos años de acuerdo a sus objetivos climáticos para mitad de siglo.
A medida que más países se pongan el objetivo de ser carbono neutral en los próximos años, será necesario vincular esta meta con planes concretos e incentivos económicos sólidos que generen la señal de precio necesaria para reducir emisiones de la manera más costo-efectiva.
Con información de: Climate Change News